Muchos vimos el trailer de “Malcolm & Marie” de Sam Levinson y nos llamó mucho la atención. Una estética de celuloide monocromático reinaba el metraje y un drama entre una pareja iba a ser el centro de la historia. Las esperanzas subían ya que el 2021 también parece que tendrá una falta de películas y la sed de buena cinematografía es insaciable. Lastimosamente debo decir que lo que Netflix presentó en su plataforma de streaming no fue lo prometido.
“Malcolm & Marie” es un drama de pareja escrito y dirigido por Sam Levinson (“Assassination Nation”, “Another Happy Day”) en la que cuenta una historia con solo dos personajes, Malcolm (John David Washington – “Tenet”, “BlackKklansman”, “Monsters and Men”), un director de cine que acaba de estrenar su nueva película y espera ansioso lo que dirá la crítica y Marie (Zendaya – “Spiderman: Far From Home”, “Dune”) su novia.
Si nos guiamos por el trailer esperamos una película sobre las diferencias entre la pareja y como intentan solucionar sus diferencias, la película que se nos presenta es algo distinto. El bucle en el que se maneja la historia de cómo Malcolm critica a una columnista de cine porque espera que no entienda su película y piense que todo es algo político, a la vez Marie está enojada porque la película que hizo Malcolm es basada en la vida de ella y no le dio las gracias. Son 120 minutos de una pareja discutiendo lo mismo una y otra vez. Un guion incómodo e infantil dirige el filme por lo que claramente es el director, Sam Levinson, enojado con la crítica por el fracaso de su película anterior, pero poniendo todo eso en el personaje de Malcolm. Se siente como si alguien se quejara una y otra vez porque no entienden su genialidad artística, la cual carece, cosa demostrada en este filme.
Creo que para ser cineasta debes aceptar que hay gente a la que no le gustará lo que haces y tienes que estar abierto a toda clase de comentarios. Honestamente “Malcolm & Marie” no tiene motivo para existir. El filme es una queja que se repite una y otra vez que deja ver las verdaderas intenciones del director y su manera infantil de ver la industria y el mundo del ámbito cinematográfico. Puede que la decisión de filmar todo en monocromo sea solo para que parezca artístico, pero la verdad es que esta decisión estilística no tiene fundamento alguno. No hay necesidad para la eliminación del color ni para tener una película tan larga que no llega a ningún lado. El guion se mantiene dando vueltas sobre si mismo, esto logra que nunca se tenga un viaje emocional, los picos dramáticos son inexistentes y el texto de los personajes es inmaduro y directo desde los primeros minutos. La película carece de subtexto y todo lo lanza en tu cara sin dejar espacio a pensar en qué otras cosas pueden haber debajo.
Un gran problema que tiene Hollywood es el llamado White-wash que hacen a las producciones. En la mayoría de películas y series siempre se tenía gente blanca y guapa, pero lo que hace el director en “Malcolm & Marie” es lo contrario. En un intento de simpatizar más con el público y ocultar sus intenciones, tiene de reparto a dos actores negros. Esto no tiene nada de malo hasta que te das cuenta que una de las razones por las cuales el guion se siente incómodo y extraño es que lo escribió él mismo. Es un hombre blanco y privilegiado intentando escribir como negro. Esta situación hace que ni la dirección salve la naturalidad que pudo haber tenido la actuación. No puedes escribir un guion naturalista si no tienes conocimiento de la naturaleza que buscas.
Es una lástima por John David Washington porque sus dos últimas películas han sido como un protagonista unidimensional. En “Tenet” lo vimos sin personalidad y casi que sin diálogo y ahora lo vemos recitando un guion sin profundidad y lleno de quejas que no lo dejan desarrollarse como el buen actor que es. Por otro lado, Zendaya sigue haciendo el mismo papel de siempre. Creo que hay que aceptar que ella no es una actriz excelente y que carece de matices actorales. La Zendaya que vemos no encaja con el perfil de la pareja porque luce como una niña y su interpretación es casi una copia de lo que hizo en “Spiderman” solo que con más gritos y menos ropa.
¿Qué se puede rescatar de “Malcolm & Marie”?
Sus planos secuencias y su propuesta fotográfica muy bien ejecutada. Un estilo que sin duda alguna es hermoso, pero carece de motivación narrativa. La puesta en escena de Levinson es buena por lo que se puede decir que es un director competente, aunque esté sufriendo mucho por su guion. A mi parecer, lo mejor de la película es su banda sonora compuesta de jazz y funk que te hacen mover el cuerpo y divertirte un buen rato.
A fin de cuenta no les puedo recomendar esta película porque realmente no vale la pena y solo deja en evidencia resentimiento de Levine ante las críticas de sus películas pasadas y cómo no es capaz de superarlo. Por otro lado, se hace evidente lo que sucede en estos últimos años en la industria. Cada vez se nota más una preocupación fuerte por la estética y se deja de lado lo principal del cine que es su historia y los conceptos que buscas contar. Aunque el cine sea un medio audiovisual, las imágenes y sonidos bonitos no son suficientes para sostener una película, es necesario tener un discurso o una historia sólida que agarre al espectador y lo lleve de viaje por la longitud del metraje.
Trailer:
