Internacionales

Crítica: “Cuckoo” y el buen terror clásico en la modernidad

cuckoo poster

Que hermosa sensación es encontrar una película que sabes que vas a disfrutar desde el segundo 1. Al igual que en otras ocasiones, me meto a ver “Cuckoo” sin saber absolutamente nada. Lo más que había visto es un still de la película que aparecía en twitter una y otra vez, casi como si fuera la única imagen promocional. Igual me animo a verla y quedé más que encantado con lo que me encontré.

“Cuckoo” es una película de terror y misterio del 2024 dirigida por el director alemán Tilman Singer, este siendo su segundo largometraje de ficción, el primero fue “Luz” en el 2018.

Esta película narra la historia de una chica llamada Gretchen (Hunter Schafer“Kinds of Kindness”, “Euphoria”) quien se muda a los alpes alemanes junto con su familia. Ella claramente no quiere estar ahí y busca volver a los Estados Unidos lo antes posible. En su estadía en alemania con su familia, queda trabajando en un hotel y ahí comienza a ser acechada por cosas inexplicables que suceden en las noches. Poco a poco va descubriendo que una mujer está atacando a otras mujeres en el hotel en el que trabaja.

Algo que me encantó desde que comenzó fue la estética. Con su grano pronunciado, es inevitable recordar los filmes de los años 80 esto se debe por el uso del filmstock Kodak 500T y 350D, cintas de 35mm que hoy muchos buscan emular digitalmente ya que te ofrece una densidad en los colores que es simplemente hermosa y hace que cada elemento en pantalla se sienta orgánico y hasta tal punto, táctil.

Con eso, es necesario hablar de la dirección de arte porque la atmósfera que se crea en “Cuckoo” es impecable, particularmente en la creación del hotel. Este espacio no es solo un escenario, es un símbolo del tiempo atrapado, una realidad suspendida donde las texturas de la madera y los verdes vibrantes de las plantas cobran vida en pantalla. La cinematografía resalta estas características, haciendo que los colores densos casi sobresalgan.

La cereza del pastel es la actuación de Hunter Schafer que es sin duda el núcleo emocional de Cuckoo. Cada escena en la que aparece está cargada de tensión; sus enormes ojos azules hacen que sientas desde el miedo más profundo hasta una vulnerabilidad sofocante por la que va pasando el personaje. Schaffer domina el ritmo emocional de la película, no simplemente reaccionando a los horrores que la rodean, sino que parece ser una extensión de estos, llevándonos a través de su experiencia de manera casi visceral.

Los efectos especiales juegan un papel fundamental en la transición de ser un thriller psicológico a un horror más visceral que es la manera en la que va evolucionando la película. La sangre, de un rojo casi caricaturesco, no busca el realismo, sino que se convierte en una herramienta estilística que busca recalcar lo macabro. El diseño de maquillaje de la mujer misteriosa, cuya presencia se siente amenazante y perturbadora, añade a la creciente sensación de que el filme se mueve entre lo surrealista y lo grotesco.

El director maneja el terror de una manera multifacética en “Cuckoo”. No se trata simplemente de la amenaza física de una figura asesina sino también del miedo auditivo y psicológico que comienzan a  entrelazarse desde los primeros minutos hasta el desenlace. Los cantos de las aves, los sonidos de los bosques que llenan el vacío, y las tensiones psicológicas entre los personajes van creando una atmósfera de claustrofobia emocional. La relación entre Gretchen y Alma (la hermana de Gretchen) es particularmente fascinante en este sentido, ya que al igual que la película evoluciona, la relación entre ellas también. Puede que al principio Gretchen la odie o tenga cierto tipo de negación hacia Alma pero al final tenemos lo opuesto a eso y vemos como esa evolución va a impactar el significado del climax de la película, porque -spoilers- Alma pasa de parecer una víctima misteriosa o ser un gran peligro para el mundo y por ahí mismo nos deja muchas preguntas acerca de lo que sucederá en ese universo.

Aunque “Cuckoo” no aspire a una profundidad filosófica evidente, no por eso es menos efectiva en su objetivo de entretener. El filme se toma el tiempo necesario para desarrollar su tensión, pero nunca pierde de vista su propósito fundamental: ofrecer una experiencia absorbente y entretenida. No es una película para analizar por mil horas ni para hacer grandes ensayos sobre su significado, de hecho, te tiran todo en cara poco a poco, un tipo de experimento que emula al pájaro Cuckoo pero con mujeres que parecen volverse locas o algo así, no tiene que tener sentido, tiene que ser aterrador y el espectador tiene que sentir algo, y lo hace. Esta película a mi, me encantó porque me parece muy divertida terrorificamente hablando y a la vez tiene una selección musical genial. Es todo lo bueno para mi.

Si desean verla para ver si les gusta o no, pueden hacerlo con Amazon Prime Video en este link.


Calificación

Trailer:

Related Articles

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Back to top button