Las últimas semanas en cualquier momento en el que abriera Tik Tok salían personas hablando, reaccionando o haciendo algún trend referente a “Saltburn” y tenía muchas ganas de verla para ver qué era lo hacía que la gente estuviera tan loca y cuando investigué quién dirigía, me di cuenta que fue Emerald Fennell y me sentí mal porque hasta ahora tampoco he tenido chance de ver “Promising Young Woman”.
“Saltburn” es una película del 2023, una comedia negra / thriller psicológico dirigida por Emerald Fennell y producida por la Metro-Goldwyn-Mayer.
La historia que se cuenta en “Saltburn” es la de un chico universitario llamado Oliver Quick (Barry Keoghan – “The Killing of a Sacred Deer”, “Dunkirk”) quien entra por beca a la universidad de Oxford. Él busca hacer amigos y le llama la atención un chico llamado Felix Catton (Jacob Elordi – “The Kissing Booth”, “Priscilla”), quien viene de una familia de clase altísima. Oliver le dice a Felix que ha tenido un pasado horrible y este lo invita a pasar el verano en la mansión de su familia, donde se forman unas reuniones excéntricas que terminan en caos.
Desde su inicio se hacen muy evidentes un par de cosas: el color y la fotografía hermosa. “Saltburn” está hecha para que parezca en su mayoría luz natural, con excepción de las escenas de fiesta y hay un cuidado milimétrico con la puesta en escena y composición de planos. Realmente a nivel estético, esta película es un delicioso bizcocho. Sus colores brillantes y que complementan a la perfección las imágenes de la aristocracia británica. Aunque también se evidencia algo que nunca entendí la lógica que es que la película tiene un aspecto de 1.33:1 que es casi cuadrado. Luego leyendo por ahí me encuentro que la directora dice que es para que el espectador sienta que es como un espía en la historia, pero más que eso yo siento que es una imagen recortada y ya. No sé, quisiera que estos formatos se fundamenten más a nivel narrativo y que realmente tengan una función coherente.
Para resumir un torrente de pensamientos que tengo: “Saltburn” está cool. Esta parece ser varias películas pegadas en una sola. Comienza como un drama romántico con un chico en busca de una identidad, luego se convierte en una película de fiesta y traición y termina con una película de suspenso que tiene una secuencia de revelación que parece sacada de un whodunit. Esta mezcla de cosas la hace una pieza audiovisual super interesante y es que no te aburre en ningún momento y se mantiene en constante movimiento. Esto combinándolo con las actuaciones geniales que tiene de parte de Keoghan y Elordi en los protagonistas, se convierte en joya. Eso sí, y que me ha parecido gracioso, “Saltburn” es una buena película comercial para adentrarse en el mundo del cine extraño, ese cine que tiene sus cosas asquerosas pero que juguetea en la comedia.
Aún luego de días de haberlo visto tengo varias dudas, la principal siendo: ¿De qué me está hablado esta película? Por un lado puede ser el amor o la obsesión, pero no lo creo porque esa idea se desintegra rápidamente a la mitad de la película, puede ser también esta locura que tiene la clase baja y media de idolatrar a la clase alta buscando cualquier manera para encajar o ser parte de ella, mientras que ese círculo aristocrático te expulsa y me inclino más por esa teoría, o simplemente puede ser una película para pasarla bien un sábado por la noche y ya, eso sería igual de válido. Lo que sí es seguro es que esta es otra película que se suma a las películas raras en las que actúa Barry Keoghan y es que creo que sería extraño verlo en un papel normal. Después de lo parecido que es su papel en “Saltburn” con “The Killing of a Sacred Deer” de Yorgos Lanthimos, es imposible sacarse de la mente a Barry como este tipo que no respeta a la sociedad y vive en un mundo paralelo.
Apenas puedan, deben ver “Saltburn” es divertida, asquerosa y hecha para sentir una ensalada de sensaciones.
Trailer:
